Dijo Carlos Alberto Orellana en un reportaje de una radio. En Santiago del Estero, decir “el mercado” equivale a decir el Mercado Armonía, pues el antiguo Mercado de Abasto, que desde 1951 estaba en la avenida Roca Norte, entre las calles Taboada y Carranza, hace diez años fue sacado de nuestra ciudad. Desde Abril de 2013, el Mercado Concentrador Frutihortícola de Santiago del Estero presta sus servicios a mayoristas y minoristas desde la ciudad de La Banda, pues está a la vera de la ruta provincial Nº 1, enfrente del barrio Mishqui Mayu.
Superando los embates del modernismo a ultranza, el moderno edificio del Mercado Armonía sigue albergando una parte importante de la cultura santiagueña, conservando tradiciones sin dejar de avanzar en cuanto a la atención al público, la organización de los puestos de venta y servicios, el orden y la limpieza.
Nos cuentan que el edificio actual ha sido inaugurado en 1.936, comenzando entonces una etapa de actividad más ordenada que antes, cuando tenía otro aspecto, mucho más sencillo, más bien parecido a un caserío. El nuevo edificio del Mercado Armonía vino a dotar al centro de la ciudad de Santiago del Estero, de una construcción imponente. Su ubicación, a una cuadra de la Plaza Libertad, lo hace muy accesible para los vecinos de nuestra ciudad y para los visitantes.
En dos de las veredas del Mercado Armonía, hay locales comerciales que venden ropa y calzado. En la vereda que da a la peatonal Tucumán, hay un par de negocios de esa índole y dos bares. La parte de atrás del mercado corresponde al pasaje Castro, cuyo nombre recuerda al médico Juan Bautista Castro, gobernador de la provincia que encargó al arquitecto Jorge Kálnay, la elaboración del proyecto y la construcción del nuevo edificio para el Mercado Armonía, que fue inaugurado cuando Castro aún era gobernador.
El pasaje Castro tiene una extensión de una cuadra y alberga una feria dedicada principalmente a la venta de ropa y calzado. También se puede comprar algún bombo en la feria del pasaje o en puestos del mercado, en planta baja o en el primer piso.
En los puestos de la planta alta, uno puede comprar artículos regionales, hacer reparar algunos artículos hogareños o almorzar, pues hay muy buenos comedores. La planta baja es más amplia, y a ella concurre mucha gente a comprar carne, verduras, frutas, pan de fábrica o casero, mercaderías de almacén, especias, artículos regionales y también a comer algo.
Justamente, en uno de los puestos de comidas de la planta baja, es que ocurrió el reportaje mencionado.
El nuevo estadio de nuestra ciudad, que está cerca del Puente Carretero, es una de las sedes del campeonato mundial de fútbol Sub-20, que se está jugando en nuestro país. Hace pocos días, gente de la asociación que rige el fútbol profesional en el mundo, afirmó públicamente que las mejores milanesas se comen en el Mercado Armonía de Santiago del Estero, ya que lo habían visitado en un día de descanso. Esto movilizó a la prensa, que buscó referentes entre el público en general y especialmente entre quienes se dedican a la venta en el mercado.
Carlos Alberto Orellana es quichuista, guitarrista, cantor y autor. Fue parte en los primeros años de nuestro Alero Quichua Santiagueño. Orellana tenía una parrillada en la esquina de Congreso y Garibaldi. La gente del Alero Quichua iba frecuentemente a comer algo. Don Sixto Palavecino contaba que se acercaba a donde el amigo estaba asando carne, que podía ser de distintos cortes vacunos, o de cabrito, de pollo o de cerdo; entonces, Don Sixto le preguntaba: “¿Qué canquita estás haciendo?” (¿Qué asadito estás haciendo?), a lo que Orellana respondía diciéndole qué tipo de carne estaba asando.
Poco tiempo después, la gente del Alero Quichua pasó a llamar Canquita al amigo Orellana, al que también llaman Petiso Orellana, en alusión a su estatura. Canquita Orellana atiende su local de comidas rápidas en el Mercado Armonía, mientras espera la llegada de algún amigo para conversar; si es para hablar de asuntos “de antes”, mejor; si llega alguien del Alero Quichua, mucho mejor, y si es para conversar en quichua, el diálogo es tan sabroso como las milanesas del mercado, o tal vez más.
06 de Junio de 2023.