Nos hemos dicho unos a otros ayer, tal como hacemos cada 29 de Mayo. Es un día para celebrar, porque el 29 de Mayo de 1876 nació Andrés Avelino Chazarreta, en la ciudad de Santiago del Estero.

A los quince años de edad, ya tocaba guitarra, mandolín, violín, piano y bandurria. En la Escuela Normal de nuestra ciudad, se recibió de maestro y ejerció la docencia en escuelas de Santiago. También enseñaba guitarra y mandolín en forma particular.

Andrés Chazarreta escuchaba las músicas y los cantares de la gente paisana, y así había ido aprendiendo y atesorando el arte nativo santiagueño. En 1911, reunió treinta personas de distintas edades, entre músicos, bailarines y cantores. Hasta donde se conoce, antes de Don Andrés Chazarreta, nadie había llevado el arte nativo al espectáculo, salvo lo que se hacía en los circos. La intención de Don Andrés era la de presentar esas manifestaciones populares en los grandes escenarios, hasta entonces dedicados principalmente a la música clásica europea.

Don Andrés Chazarreta intentó hacer una presentación en el teatro 25 de Mayo, de nuestra ciudad, pero el pedido fue rechazado, pues lo que ofrecía no era “de primer nivel” como lo habitual en esas grandes salas. Entonces, llevó el espectáculo al Paseo del Águila, cerca del teatro, con una gran concurrencia y aceptación del público que se agolpó para presenciar la novedad. Las expresiones artísticas periféricas, las de los patios de tierra, estaban siendo mostradas como espectáculo en zona céntrica de la ciudad. 

Así, con aceptaciones populares y rechazos de administradores de salas, también de alguna parte del pueblo, Don Andrés Chazarreta siguió persistiendo en su afán por mostrar al país el arte nativo del Norte Argentino, especialmente de Santiago del Estero. Recordemos que, en esa época, ya era costumbre en mucha gente el rechazar lo propio y admirar lo foráneo, pese a que se puede hacer ambas cosas mientras se sostiene principalmente lo nuestro.

Finalmente, después de mucho andar y gestionar, el 16 de marzo de 1921, la Compañía de Arte Nativo se presentó en el Teatro Politeama de Buenos Aires. Cuentan que, poco después de comenzada la función, algunos de los asistentes se retiraron, molestos por lo que se estaba exhibiendo nada menos que en un teatro, pero una gran parte del público recibió muy bien lo que para muchos de ellos era una novedad.

En el diario La Nación, el escritor Ricardo Rojas publicó una elogiosa nota en la que se refería al espectáculo como “El Coro de la Selva y las Montañas”. La Compañía de Arte Nativo estaba programada para tres días de actuaciones en el teatro Politeama, pero después de la primera presentación, fue contratada para más de tres meses, con un total de noventa y seis funciones. La presentación en el Politeama es considerada histórica, por ser la primera difusión nacional de la música folclórica argentina.

La delegación organizada por Don Andrés Chazarreta estaba integrada por lo que llamamos “gente común”, pues no eran artistas dedicados a ello, sino personas que llevaban su vida tal como cualquier “hijo de vecino”, salvo la cantante Patrocinio Díaz, cuya voz privilegiada había sido preparada con estudio de canto. Don Andrés Chazarreta, un maestro de escuela y músico talentoso, desconocido hasta entonces por Buenos Aires, se convertía a partir de entonces, en el primer empresario del folclore argentino.

Cuentan que su abuela solía entonar una zamba de autor desconocido, que él había ido aprendido desde la infancia, y cuando ya sabía escribir música, había volcado a la partitura esa melodía de la llamada Zamba de Vargas. Después hubo más recopilaciones y creaciones propias, antes de la creación de la Sociedad Argentina de Autores y Compositores de Música. En el nuevo organismo, llamado generalmente por su sigla, SADAIC, Don Andrés registró casi 400 temas musicales.

Entre las piezas registradas y grabadas está la que Don Andrés Chazarreta presentaba así: “La López Pereyra, zamba salteña”, evidentemente sin saber quién era su autor. En Abril de 1960, falleció Don Andrés Chazarreta, santiagueño que hizo por el folclore argentino muchísimo más que lo relatado en este artículo. El 18 de Octubre de 1950, había fallecido en un hogar de ancianos de Salta, a los 88 años de edad, el maestro y músico Artidorio Cresseri. Años después, hubo un juicio promovido por amigos, admiradores, colegas y descendientes del talentoso pianista salteño.

Finalmente, la Justicia decidió repartir en partes iguales la autoría y beneficios de la zamba López Pereyra, entre Andrés Chazarreta y Artidorio Cresseri.

En el año 2011, el Congreso de la Nación instituyó que cada 29 de Mayo es el Día Nacional del Folclorista Argentino, mediante la ley Nacional número 26.665, promovida por la senadora nacional Ana Corradi de Beltrán, representante de nuestra provincia. Hasta entonces, en Santiago del Estero ya teníamos el Día Provincial del Folclorista, también como homenaje a Don Andrés Chazarreta, en el aniversario de su nacimiento.

Argentina recordó ayer al Patriarca del Folclore Argentino, Don Andrés Chazarreta, y todos nos hemos felicitado por ello, ya que cada uno a nuestro modo, estamos siguiendo la huella marcada por los precursores. 

30 de Mayo de 2023.