Cuando uno se dispone a viajar, tiene que alistar lo que va a llevar. Si el viaje es breve y hacia un lugar cercano, el avío puede ser muy simple o se puede prescindir de él, pero si va a ser una travesía extensa, hay que estar bien preparados para poder andar bien.
Para un viaje desde la ciudad de Santiago del Estero hacia Las Termas de Río Hondo, Clodomira, Fernández o Loreto en ómnibus, a lo sumo uno llevará alguna prenda para un posible cambio de tiempo; si prefiere puede llevar una botellita con agua en Verano, aunque llegando a destino hay en abundancia.
Si el viaje se hace en un medio público de transporte o en un servicio especial, en los que quienes conducen el vehículo son profesionales que deben haber hecho todas las previsiones, el pasajero se ocupa solamente de lo que necesitará una vez llegado a destino, especialmente en los viajes de una provincia a otra, donde puede encontrar condiciones climáticas distintas. La consulta a un servicio meteorológico confiable ayuda para decidir qué ropa llevar. Hay viajes en los que las condiciones climáticas son las mismas o muy similares en el punto de partida y en el lugar de arribo.
Hay viajes en los que el vehículo une dos puntos de iguales características, pero pasando por lugares totalmente distintos, que pueden ser escabrosos, desérticos, muy fríos o de temperaturas muy elevadas. Durante la travesía, con las posibilidades técnicas actuales, si el vehículo viaja de noche o con las ventanillas cerradas con cortinas, el pasajero no llega a saber que pasó por lugares en los que no podría permanecer con el poco avío que está llevando en el confortable transporte.
Los viajes son muy lindos y confortables, salvo que algo falle en el medio de transporte y uno deba quedar expuesto a condiciones para las que no se había preparado. Sería deseable que los encargados de conducir el vehículo, hayan previsto que no siempre se puede llevar a los pasajeros sin paradas imprevistas.
Cuando uno viaja a cargo de un vehículo y no ya como pasajero, debe planificar bien lo que va a hacer, para que las eventualidades no lo sorprendan. Por ley está determinado que debe tener matafuegos y balizas. También es recomendable contar con botiquín de primeros auxilios, barra de remolque, linterna, herramientas, reserva de agua y todo otro elemento que ayude a reducir los riesgos y contratiempos que puedan aparecer eventualmente.
Previo al viaje, es preciso informarse respecto a la distancia a recorrer y estado de las rutas a transitar, consultar un pronóstico meteorológico extendido para los lugares por donde hay que pasar, calcular el combustible, lubricantes y aditivos, en lo posible para todo el viaje, a fin de no depender del funcionamiento y provisión en los lugares intermedios. Habrá que tener prevista una buena comunicación telefónica durante el trayecto, además de un buen avío de alimento y agua. Se tendrá en cuenta también que podría ser necesario parar en un lugar no previsto y permanecer ahí un tiempo mayor que el pensado para todo el trayecto; por eso es necesario prever alimento, agua y abrigo.
Una vez hechas todas las previsiones y confiando en la protección de Tata Yaya, nos disponemos a disfrutar del viaje. Es importante también partir a un horario razonable, para no caer en imprudencias por causa del apuro. Cuando uno ha tomado todos los recaudos posibles, tiene todo el derecho para mostrarse optimista y confiado.
En estos días cercanos al 10 de Junio, también pensamos en cómo habrán sido los preparativos de Luis Vernet y su gente para ir a las Islas Malvinas hace casi doscientos años. Seguramente les habrá llevado tiempo preparar el viaje en barcos de aquella época. Habrán tenido que revisar el casco, las velas, los remos, el cordaje… en fin, cada barco en forma minuciosa; habrán tenido que calafatear los barcos antes de hacerlos a la mar. Después habrán cargado los abastecimientos para el viaje y la permanencia en los primeros tiempos allá (alimentos, agua, abrigo) y por último los animales de montar y para criar. Una vez listos para zarpar, seguramente habrán verificado una vez más las condiciones del tiempo, el viento y el oleaje, datos que en esos años eran mucho menos certeros que ahora.
Con venturas y desventuras, finalmente Luis Vernet consiguió asentar un emprendimiento ganadero en las Islas Malvinas. El 10 de Junio de 1.829, Martín Rodríguez,Gobernador de la provincia de Buenos Aires, designó a Luis Vernet Comandante Político Militar en las Islas Malvinas e islas adyacentes al Cabo de Hornos en el Océano Atlántico.
El 30 de Agosto de ese año, Vernet tomó posesión de las islas en nombre del Gobierno de Buenos Aires; en ese acto se enarboló la Bandera Argentina, el Comandante invocó a Santa Rosa de Lima en su día, demandó de los habitantes de las islas el cumplimiento de las leyes, avisó que el Gobierno iba a colaborar para que las islas fuesen pobladas por argentinos y finalizó con un “¡Viva la Patria!”
Los ingleses, acostumbrados a invadir países ajenos alrededor del mundo, reclamaron por el acto de soberanía argentina en un territorio que consideraban propio. Se dedicaron a merodear y depredar en las islas, hasta que con el apoyo de un navío estadounidense, destruyeron las instalaciones argentinas y expulsaron a nuestros criollos en los primeros días de 1.833.
Casi ciento cincuenta años después, combatientes argentinos recuperaron para nuestro país el control sobre las Islas Malvinas e Islas del Atlántico Sur. Las previsiones argentinas para el enfrentamiento bélico que se vendría no han sido suficientes para doblegar a los combatientes ingleses que vinieron ayudados por los Estados Unidos y Chile, y desde mediados de 1.982, los ingleses tienen nuevamente la posesión de las islas argentinas.
Los ingleses nos invaden cada día más. Tenemos que avanzar sobre ellos hasta lograr la total integración territorial argentina. La jornada va a ser larga y llena de imprevistos; es necesario preparar cada día un buen avío cultural y patriótico para lograr un efectivo avance de nuestra argentinidad sobre lo anglo. Debemos armarnos de amor por nuestra Patria y preparar bien nuestro bagaje todos los días, para ver si conseguimos recuperar lo perdido pues hasta hoy, estamos retrocediendo.
05 de Junio de 2.018.