Por Crístian Ramón Verduc
14/08/2007

“Ama súa, ama llulla, ama ckella”. Así nos enseñan nuestros ancestros incaicos. La cordillera de Los Andes, como espina dorsal del continente, ha visto pasar por ella a gente de distintas épocas y distintas razas. Muchos de los que vivieron o transitaron Los Andes siguieron las normas incaicas como guía en la vida. Estas tres frases que son un mandato para la descendencia de los incas, sintetizan una serie de pensamientos que, coincidentemente, enseñan en distintas culturas del planeta a convivir con el prójimo. El ladrón y el mentiroso perjudican a quienes los rodean y viven rodeados de una atmósfera de desconfianza. El perezoso, aparte de obstaculizar la existencia ajena, corre el riesgo de recurrir al robo o a la mentira para sobrevivir sin aportar el esfuerzo que se espera de él. La usura, la estafa y otras formas de despojo, son simples variantes del robo, disfrazadas con una cierta cantidad de mentiras. La demagogia, el incumplimiento de compromisos, el engaño, se basan en la mentira. Si en una ciudad observamos atentamente ciertas actitudes y modos de vida, encontraremos casos de gente viviendo de la mentira y apropiación de lo que no le corresponde, como consecuencia de su poco apego al esfuerzo. Si bien es cierto que la honestidad y la laboriosidad no son patrimonio exclusivo del campesino, es en el ámbito rural donde aún se encuentran atenuadas las urgencias materiales que acosan a los citadinos, llevándolos a una actividad intensa para sobrevivir, progresar o satisfacer ambiciones.

El General José de San Martín, hijo de españoles nacido en Yapeyú (provincia de Corrientes) era criollo, según el concepto de la época. Decir criollo era como decir “español nacido en América”. Según el concepto que tenemos ahora del hombre criollo, podemos decir también que El Libertador era criollo. Seguramente el hecho de haber sido criado por Rosa Guarú, mujer de esas tierras de esteros y palmerales que hablaba guaraní, habrá influido en parte de la formación del genial patriota. Sus ancestros españoles habían venido para “hacerse la América”, que equivale a decir que su intención era enriquecerse en este rico continente. En España, San Martín se formó militar como su padre. Al regresar a estas tierras, aprovechó los conocimientos para luchar por los sentimientos. Puesto al servicio de la Patria, recurrió a los gauchos correntinos y de otras regiones para formar su célebre y disciplinado Regimiento de Granaderos a Caballo. El correntino San Martín, hábil con la espada en combate y con la guitarra en los fogones de campamento, a cada cargo que ocupó lo tomó como un puesto de servicio, un lugar donde poner lo mejor de sí para la liberación de América del Sud y la formación de una Patria Grande. No luchó por honores o dinero. Luchó por la libertad, no sólo de las regiones que luego se constituirían en repúblicas, sino fundamentalmente por la libertad de los seres humanos que habitaban estas tierras. Cuando le tocó recibir remuneraciones por sus servicios, aceptó lo que le era necesario. No cayó en el engaño de rechazar todo ni en la tentación de apropiarse de todos los dineros y honores que le ofrecieron los distintos pueblos. Cuando fué necesario, cedió el lugar de lucha, evitando caer en el engaño de que podría continuar la extensa campaña libertadora. Cumplido su enorme trabajo, viudo y con la salud quebrantada, el General se radicó en Europa para dedicarse a la formación intelectual y moral de su hija. Las inolvidables máximas de San Martín para su hija Mercedes son un ejemplo de apego a la tolerancia, bondad y respeto al prójimo. Hay muchos textos referidos al militar de caballería que liberó a medio continente y falleció en Francia el 17 de Agosto de 1.850. En este espacio hemos querido referirnos al criollo Don José Francisco de San Martín, correntino de nacimiento, sudamericano en su lucha y universal en sus sentimientos. Un hombre que no quiso nada que no le correspondiese, evitó la mentira y no midió sus esfuerzos para bien de la Patria.

14 de Agosto de 2.007
Compartir
Comentarios
Amigos del Alero
Programas que difunden la Cultura de Santiago del Estero desde Radio Nacional...
Emisoras que Transmiten
Alero Quichua
  • Radio Norteña, AM 1520
    Grand Bourg (Provincia de Buenos Aires)
    Domingos de 11 a 13 horas
    Director: José Barraza
Alero Quichua Santiagueño
La audición radial se caracteriza por su espontaneidad, no se elabora un libreto en razón de que el programa se hace en vivo con la participación del público que se hace presente en el Salón Auditorium.
Seguinos
Puede visitarnos en los siguientes Redes:
Copyright © 2006 - 2024 todos los derechos reservados.