Bien podríamos decir que esta es la semana quichua, por los acontecimientos que conmemoramos en ella. El 23 de Agosto de 1935 nació Felipe Benicio Corpos en La Loma, departamento Figueroa, y el 27 de Agosto es Día Provincial de la Lengua Quichua, por que en esa fecha de 1997, falleció el Profesor Doctor Domingo Antonio Bravo.

Ambos próceres culturales fueron parte del grupo fundacional del Alero Quichua Santiagueño. Contaba Don Sixto Palavecino que, cuando vivía en Villa Salavina, había tenido noticias de que en la ciudad de Santiago del Estero había un docente que enseñaba quichua y que había publicado libros sobre el idioma de sus mayores. Prestando mucha atención, había podido saber que ese hombre se llamaba Domingo A. Bravo. Esta noticia lo llenó de alegría y se propuso conocer al educador. Todo eso lo cuenta Don Sixto en su chacarera Penckacus Cáusaj Carani (Avergonzado Vivía). Con los datos que fueran publicados en el diario, Don Sixto escribió una carta a Don Domingo Bravo, a la que el Maestro respondió prontamente, pidiéndole que le escriba siempre en quichua, usando las letras que le resultasen más adecuadas para expresar su pensamiento de hombre quichuista. Así, en forma epistolar, se inició la amistad entre quien sería después el mayor difusor del quichua santiagueño y quien sería el mayor estudioso, a la vez que Yacháchej (Maestro) del idioma de nuestra tierra.

Felipe Corpos se había criado entre quichuistas, en cercanías del Río Salado. Después vivió en la ciudad Capital de la provincia, donde cursó la escuela secundaria, para una vez finalizada la misma dirigirse a Córdoba, donde estudió en la Facultad de Derecho, sin llegar a completar sus estudios universitarios, pero logrando afirmar sus conocimientos e inquietudes intelectuales, a la vez que forjó valiosas amistades. De vuelta en Santiago del Estero, trabajó en el comercio mientras daba rienda suelta a sus inquietudes culturales, participando en diversos emprendimientos con gente del folclore y creando poesía de calidad creciente.

Habitualmente recordamos el relato de Don Sixto Palavecino sobre cómo conoció a Felipe Corpos: Cada vez que entraba a un lugar, Don Sixto saludaba a todos en quichua, incluso al subir en el ómnibus urbano. En un viaje de regreso a casa después de una jornada laboral, al subir en el colectivo Don Sixto soltó su habitual saludo en quichua a viva voz, y desde el fondo alguien le respondió también en quichua, iniciando un diálogo quichuista aún sin verse, por causa de la cantidad de gente que había entre ellos, hasta que finalmente Don Sixto llegó al fondo del vehículo y pudieron estrecharse las manos, dando nacimiento a una amistad ancha sinchi (muy fuerte).

Con Sixto solía visitar a Corpos en la casa para conversar en quichua, ambos gustosos e interesados en el bagaje de conocimientos y vivencias del interlocutor. Contaba Don Sixto que cuando se retiraba, Corpos lo acompañaba hasta la parada del ómnibus, estirando la conversación hasta el estribo del transporte público. En una de esas ocasiones, en la calle, Don Sixto le había dicho a Felipe que tenía el anhelo de hacer una audición radial en quichua, a lo que Corpos respondió con gran entusiasmo. No sería fácil conseguir un espacio en la única radio existente en toda la provincia, pero con el antecedente de Áshpap ‘Rimaynin (El Habla de la Tierra), el programa emitido a fines de los años ’50 por el Profesor Domingo Bravo, con la participación del hijo mayor de Don Sixto, había esperanzas de que el quichua no sería rechazado.

Pronto los dos amigos decidieron formar un grupo de gente confiable involucrada con el quichua. Corpos sugirió invitar al poeta y cantor quichuista Don Vicente Salto y entre ambos invitaron a quienes serían el grupo inicial del sueño quichuista que aún nos une. Don Sixto sugirió invitar al Profesor Domingo Bravo para que se encargue de hacer el discurso de apertura de cada ciclo del programa radial.

Domingo Antonio Bravo nació el 4 de Agosto de 1906 en Higuera Chacra, departamento Robles. Fue un alumno brillante en la escuela primaria y posteriormente en su formación para docente en la ciudad Capital de la provincia. Destinado a enseñar en escuelas de la campaña, entró en contacto con auténticos hablantes del quichua y comenzó a estudiar el idioma de la tierra directamente de la gente que lo hablaba. Apuntes, conversaciones grabadas, cartas y simples hojas escritas por los paisanos bilingües, fueron la materia prima con que inició el titánico trabajo de elaboración de libros, diccionarios y dictado de cursos para quienes querían aprender el idioma ancestral.

Al cabo de décadas de incansable labor de aprendizaje y enseñanza, el insigne docente fue designado Profesor Honoris Causa por la Universidad. Posteriormente recibiría también el Doctorado Honoris Causa.

En el ámbito del Alero Quichua Santiagueño, Felipe Corpos ha sido el motor, el líder que impulsaba a la gente para aprender y exponer sus talentos. Cuenta Juan Carlos Almada que, la primera vez que estaba por subir a un escenario a cantar, estaba muy nervioso; su amigo Corpos, que oficiaba de presentador, le dijo un pensamiento que puede aplicarse a muchas situaciones: “Nadie está obligado a hacer más que lo que puede. Vaya y cante, que usted sabe.”

Felipe Corpos era el conductor del programa radial y el Profesor Domingo Bravo era quien decía profundos y sentenciosos discursos para la apertura de cada ciclo radial, además de participar en reuniones deliberativas, enseñar a quien estuviese dispuesto a aprender, dirigir el Curso Elemental de Quichua en el Alero y la Cátedra de Lingüística Regional en la Universidad Nacional de Santiago del Estero. Don Domingo Bravo es quien llevó el quichua a la UNSE.

En Diciembre de 1974, Felipe Corpos falleció en un cruel accidente, dejando fuertes enseñanzas de vida y un gran bagaje poético. En su homenaje, cada Domingo concluímos la audición radial cantando su poesía La Ñaupa Ñaupa, con música de Don Sixto Palavecino. Así mantenemos presentes a los compadres y amigos que tan valiosa herencia nos dejaron.

El Profesor Doctor Domingo A. Bravo continuó con sus investigaciones y enseñanzas, en la Universidad y en el Museo Histórico, donde tenía su estudio. Hasta sus últimos tiempos se lo vio transitar calles de la ciudad de La Banda y de la ciudad de Santiago del Estero, con paso corto y rostro afable, llevando un portafolios cargado de sabiduría, rumbo a su labor cotidiana en el Museo Histórico. Finalmente, su cuerpo cansado de tantos sacrificios por su amada tierra pidió el descanso definitivo. El Profesor Domingo Bravo falleció el 27 de Agosto de 1997.

En su homenaje, el 27 de Agosto es Día Provincial de la Lengua Quichua.

Los que no somos quichuistas naturales, cada vez que tenemos una duda sobre el idioma, “le preguntamos” a un libro del Profesor Domingo Bravo. También cantamos algunas de sus creaciones en quichua o castellano. Es nuestra forma de tenerlo con nosotros para que nos incentive a aprender y (¿por qué no?) enseñar a quien quiera saber quichua.

23 de Agosto de 2016.