“Un Domingo sin Alero, es un Domingo cualquiera”, decía un oyente impaciente por un nuevo año en que no hemos comenzado el ciclo radial en la fecha prometida. Oyentes, participantes habituales e interesados en hacer una primera aparición en el programa de radio, estamos inquietos, viendo impotentes cómo pasan los días Domingo sin Alero. 

Pasó el esperado primer Domingo de Marzo, luego el segundo y el tercero. Seguimos esperando. Dicen que hay problemas burocráticos, que eso demora el comienzo del ciclo anual, etc. El caso concreto es que ya han pasado tres semanas en que se podría haber contribuido a la difusión del quichua, pero por ahora hay espacios solamente para otros ritmos y géneros musicales y culturales. 

Afortunadamente, en este tiempo de receso veraniego, gente que integra nuestro grupo nativista llevó el canto bilingüe hacia escenarios de la provincia. Noemí Brandán, Marcelo Salvatierra y Doña Roberta Pajón llevaron el canto quichua a un Festival de canto quichua en el departamento Figueroa, con buena aceptación por parte de los quichuistas pobladores de la zona. 

Una numerosa delegación se presentó en el Festival del Canto Sachero, en Garza, departamento Sarmiento. Los cincuenta minutos de actuación fueron apreciados por el público de Garza y el venido de zonas vecinas. Entre ellos había muchos quichuistas. Para un quichuista es muy agradable escuchar a alguien hablando o cantando en quichua. Su corazón se dispara de emoción al escuchar “puebleros” que se expresan en su lengua materna. 

Esa misma delegación subió al escenario del Festival Nacional del Artesano, en Villa Ojo de Agua, bien al Sur de nuestra provincia. El numeroso público de Santiago y Norte de Córdoba aplaudió la presentación, pletórica de canto quichua y tradicional de nuestra provincia. Ha sido una interesante primera experiencia del Alero Quichua en esa importante ciudad casi limítrofe con la provincia de Córdoba. 

Alejandro Iñíguez difundió el canto quichua en la feria artesanal de los días Domingo en el Parque Aguirre, con su canto de temas propios entre una mayoría de canto bilingüe, finalizando con una invitación a toda persona que quiera sumarse a la patriada de nuestro Alero. 

Ahora estamos esperando, cada semana, para saber si el Domingo comenzará el ciclo de este año. Seguimos ensayando, aprendiendo temas nuevos, planeando lo que diremos si accedemos al micrófono, conversando respecto a cómo cantar en grupo y todo lo que se hace cada vez que debe comenzar nuestro Alero Quichua y no comienza. Hay inquietud en la gente. ¿Qué estará pasando? ¿Por qué desde que no está Don Sixto es problemático cada comienzo? ¿Será que no somos lo suficientemente capaces para seguir la huella tal como nos lo había pedido? 

Estamos a días del centenario de Don Sixto, que naciera el 28 de Marzo de 1.915 en el departamento Salavina. Hay muy buenas intenciones en cuanto a evocar su nacimiento, especialmente en el ámbito del Alero Quichua, lugar natural para el homenaje, pero seguimos en la incertidumbre. Lo concreto que hay por ahora es un programa especial del ciclo Zona Musical de Radio Nacional, que se emitirá el Viernes 27 por la noche, con la participación de gente del Alero Quichua y otros folcloristas identificados con el movimiento quichua. También habrá un gran homenaje en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe, que incluirá la participación de cien violines y luego la actuación de folcloristas locales, mas los que irán desde Santiago del Estero y los que vendrán desde Buenos Aires. Esto ocurrirá los días 28 y 29 de Marzo. 

La gente del Alero Quichua pretende continuar durante el año con la evocación de Don Sixto Palavecino. Es esa la intención, como es cada año la intención de comenzar puntualmente el ciclo, para aprovechar los pocos días de radio que nuestro Alero tiene durante el año. “Algo es algo, peor es nada”, diría un gracioso, pero los ritmos ajenos a nuestra cultura criolla y bilingüe tienen muchísimo más que un simple “algo” a su disposición, como si entre todos estuviésemos promoviendo la enajenación de nuestro modo de ser. 

“Ama súa, ama llulla, ama ckella” decimos en cada comienzo de audición. Sería bueno si somos consecuentes con tal enunciado, para no sustraer tiempo al quichua, para no privarlo de espacios mientras nos mentimos y mentimos que estamos interesados en difundir el quichua, para no dejarnos tentar por la inercia y la pereza. Muchos de los integrantes del grupo nativista estuvimos activos durante el tiempo de “descanso” de la audición. 

Mientras tanto, en algún lugar se está decidiendo el futuro de nuestro movimiento en pos del quichua.
No sabemos qué pasará. Tenemos la esperanza de que el próximo Domingo comencemos. Esa esperanza lleva ya tres semanas de desgaste pero sigue firme. El quichua ha sido despreciado, olvidado y dejado de lado durante mucho tiempo. El trabajo de próceres culturales ha comenzado a remediar la falla cultural, pero en los últimos años hemos comenzado a dudar del rumbo que estamos siguiendo, por causa de lo que estamos dejando de hacer. 

No sabemos a ciencia cierta cuán válida es considerada la propuesta de los más empedernidos luchadores de la lengua quichua. Chocamos de frente con indiferencias, las que no sólo vienen de afuera, sino que son más preocupantes. 

Está por terminar el mes de Marzo. Ya se han ido tres de sus cinco días Domingo. Preparémonos para el comienzo del ciclo radial del Alero. Mientras tanto, seguiremos esperando ese comienzo. El quichua debería poder esperar, pero el ataque externo contra lo tradicional es permanente, sin esperas; por lo tanto, tampoco nosotros debemos esperar. 

¡Vamos adelante con la lengua quichua! Comencemos cuanto antes a llevar el quichua a la radio, tal como lo había soñado Don Sixto. Sus cien años lo merecen. 

17 de Marzo 2.015.