Está todo blanco, está todo limpio. Por alguna razón, es tradicional considerar limpio lo que está de color blanco. Puede ser por que en ese color resultante de la suma de todos los colores visibles es más fácil de percibir la presencia de objetos extraños, salvo que también esos objetos sean blancos.

Cuando algo es muy blanco, se dice que es blanco níveo, blanco puro como la nieve. Por causa de la abundancia de hielo y nieve, la Antártida es llamada Continente Blanco. Está dentro del Círculo Polar Antártico y en ella alberga los puntos referenciales conocidos como Polo Sur Magnético y Polo Sur Geográfico. El eje de rotación de la Tierra “pasa” por la Antártida. Ello hace que el Sol, cuando es visible, no llegue a tomar mucha altura aparente por sobre el horizonte, desplazándose por el cielo en una trayectoria a la que no estamos acostumbrados los habitantes de otras latitudes.

La región del mundo cercana al Polo Norte es conocida como Ártico, por una palabra griega que se traduce como Oso, en este caso referido a la constelación de la Osa Menor, la que contiene a la Estrella Polar, que indica la ubicación del Polo Norte Celeste, punto en el espacio alrededor del cual parecen girar todas las estrellas si observamos durante una noche en esa parte del mundo. El Ártico es una gran masa helada apoyada mayormente en agua.

En la antípoda, o sea “del otro lado del mundo” o “en el extremo opuesto del planeta” se encuentra el Continente Antártico o Antártida, cuyo nombre indica esa oposición diametral con el Ártico. El punto terrestre antártico más cercano a otro continente es el extremo Norte de la Península Antártica, la que parece ser una prolongación de la Cordillera de Los Andes. Ushuaia es en el mundo la ciudad más cercana a la Antártida. Esta ciudad argentina está a unos mil kilómetros de la Península Antártica.

Nuestro país ha sido el primero en instalar una base habitada en forma constante en el territorio antártico. La base científica con mayor antigüedad en operación permanente es la base Orcadas, de la República Argentina; opera desde el 22 de Febrero de 1.904. Las otras bases antárticas argentinas permanentes son: Belgrano II, Esperanza, Jubany, Marambio y San Martín. Hay también siete bases antárticas argentinas que operan solamente en Verano.

En estas bases científicas trabaja gente de todo el país. Como no podía ser diferente a las otras actividades nacionales, también hay presencia santiagueña.

Si verificamos la nómina de personal que trabajó y trabaja en las distintas bases antárticas argentinas, es seguro que encontraremos varios nombres de santiagueños. En el primer vuelo de avión que aterrizó en la Antártida, había un santiagueño, el Sr. José Parisi. Esta hazaña se concretó el 7 de Febrero de 1.952.

Los hielos antárticos han sido visitados por la calidez de la música folclórica argentina. La canción con ritmo de chacarera Mi Base Marambio ha sido creada por gente de Santiago del Estero que conoce los rigores del Continente Blanco.

La base aeronáutica Vice Comodoro Marambio es el aeródromo apto para la operación de aviones de gran porte y, como dice la canción, es la puerta de entrada de las provisiones para otras bases.

El tema musical Mi Base Marambio, letra y música de los santiagueños Aníbal Ricardo Bulacio y José Manuel Bulacio, ha sido interpretado por el grupo cultural y folclórico La Troja en distintos ámbitos de nuestro país, incluida la Antártida, naturalmente.

El grupo La Troja impulsó y concretó la visita de dos caciques chaqueños a la Base Marambio. El líder de la comunidad Qom de la localidad de Fontana y el de la comunidad Wichí de Puerto Tirol llegaron a las heladas tierras antárticas en Junio de 2.004, para dejar sus huellas como semillas, “para que de ellas crezca el árbol de la hermandad y el espíritu de la confraternidad”. Nelcho y Leco pasaron a ser los primeros jefes de etnias aborígenes que pisaron suelo antártico.

La Troja fue el primer grupo folclórico que representó a La Antártida Argentina en el Festival Nacional de Folclore, en Cosquín, provincia de Córdoba, en Enero de 2.010, con la obra integral Somos Antártida, igual nombre que la exposición que realiza La Troja en espacios culturales.

El grupo La Troja está integrado por los hermanos Bulacio y músicos chaqueños. Los Bulacio son santiagueños. José Manuel sabe cantar en castellano, en quichua y en guaraní; es amigo de la familia de Don Vicente Salto, el poeta bilingüe que fuera el primer Presidente de la Comisión Directiva en los primeros días del Alero Quichua Santiagueño.

La vida en la Antártida es durísima. Aún así, hay gente que trabaja en ella. Hay familias completas en esos fríos paisajes blancos. Hay varios países del mundo con presencia y pretensiones en el continente polar. Es que aparte de sus bajas temperaturas, sus fuertes vientos, su escasa fauna terrestre y vistosa fauna costera o marítima, sus prolongados días veraniegos o largas noches invernales, la Antártida posee otras particularidades. Aproximadamente el setenta u ochenta por ciento del agua dulce del planeta está en ese continente; el cielo de la zona central del continente es el más traslúcido de la Tierra, por lo que hay instaladas ahí varias estaciones de observación astronómica; el estudio del clima y de las formas de vida en esta parte del mundo permite a los científicos proyectar esos conocimientos a diversas áreas, con resultados que podrían sorprendernos.

Hace más de medio siglo, en el otro hemisferio terrestre, se firmó el Tratado Antártico, por el cual los países miembros del tratado se comprometen a utilizar el territorio de la Antártida con fines científicos pacíficos y a preservar la Naturaleza en el mismo.

En el Tratado Antártico hay dos clases de miembros: Los consultivos o plenos y los no consultivos o adherentes. Nuestro país forma parte del grupo de miembros consultivos.

Conociendo la naturaleza belicista de ciertos países en el mundo, tenemos que estar atentos a lo que ocurre en la Antártida, no solo por la presencia argentina en el Continente Blanco o por su cercanía con nosotros, sino por que la Antártida es fundamental para todo el planeta. El Tratado Antártico debería mantenerse vigente por tiempo indefinido, salvo que sea reemplazado por una disposición mejor de común acuerdo y para beneficio de la Tierra.

El 22 de Febrero es Día de la Antártida Argentina, conmemorando nuestra presencia permanente en el llamado "Sexto Continente". Seguramente habrá actos oficiales y de asociaciones relacionadas con el Sur de la Patria. Individualmente, volvamos cada día nuestra mirada al Sur, pensando qué podemos hacer para velar por la preservación de la limpieza del Continente Blanco, lo que equivale a velar por la limpieza del planeta que dejamos para nuestra descendencia.

19 de Febrero de 2.013.