Vicente Javier Salto Taboada nació el 12 de Marzo de 1.913 en Tajamar, propiedad de sus mayores en el departamento Figueroa, zona habitada por quichuistas, cerca del Río Salado.
Su abuelo, el General Antonino Taboada, arengaba a la tropa en quichua, que era el idioma común a los combatientes de la época. La familia Salto Taboada conservaba el quichua en un estado de casi total pureza, sin las castellanizaciones que son habituales. También hablaban un buen castellano.
Autodidacta, sin haber cursado estudios superiores, Don Vicente Salto era un hombre culto, con un excelente vocabulario, ortografía correcta, poeta, buen guitarrista y cantor.
En su poesía se puede percibir el nivel cultural de "Don Vichi", como le decía Don Sixto Palavecino. Tomamos por ejemplos el poema Huahuálay (Mi Hijita), o el consejo para ser prudente expresado en Manarajchu (Aún no es Tiempo). La vidala Uchallicuychu (No debes pecar), con música de Don Sixto, es una serie de coplas con enseñanza moral. El gato Parachcansa (Dicen que llueve), con música de Don Sixto, y el poema Parachúntaj (Que llueva), musicalizado para chacarera por Guillermo Orellana, expresan la alegría del paisano santiagueño ante la lluvia. Todas estas obras tienen dos versiones: quichua y castellano. Parte de su obra ha sido publicada en el folleto Para Yacu (Agua de Lluvia). También creó temas folclóricos en castellano, como la chacarera Una y Otra.
Invitado por Felipe Corpos, formó parte del grupo inicial del Alero Quichua Santiagueño y Presidente de la primera Comisión Directiva. Fue cantor, recitador, relator de cuentos y dialogante quichuista en la audición radial. También enseñó en la Escuela de Quichua del Alero.
Con mucho esmero fue traduciendo poco a poco estrofas del Martín Fierro, cuidando de mantener el sentido del mensaje hernandiano, la métrica, la rima y la pureza del quichua. Parte de esa traducción ha sido grabada en el disco Volumen 3 del Alero Quichua Santiagueño, editado en adhesión al centenario de la publicación de El Gaucho Martín Fierro. En ese disco, Don Vicente Salto recita una estrofa antes de cada tema musical y de un cuento en quichua relatado por él mismo.
Su salud se deterioró seriamente en 1.977, por lo que se alejó del Alero Quichua y sus otras actividades públicas. Falleció el 21 de Abril de 1.978 en la ciudad de San Miguel de Tucumán.
En 1.982, el Alero Quichua Santiagueño comenzó la construcción de su sede social en la esquina de Granadero Saavedra y Calle 8 del Barrio Sarmiento. Por gestión de la Comisión Directiva, el 10 de Diciembre de 1.993 la Municipalidad de Santiago del Estero impuso el nombre de Vicente Salto a la calle 8.